Antes el punto preferido por los entrenadores y aperturas para lanzar el juego era line out.
Éste le daba la ventaja al apertura de tener la defensa a 10 metros de la línea del line out, lo que le permite mayor espacio para desarrollar movimiento distractores para vulnerar la defensa rival o más tiempo para llevar la pelota al wing.
Ahora debido a la modificación del reglamento por parte de la IRB, los apertura deben parase a 5 metros del último pie del scrum. Éste cambio permitió que los 10 tuvieran más espacio para dejar volar su imaginación y poder crear una jugada que logre traspasar la defensa contraria y el tiempo es suficiente para lograr con un par de señuelos llevar la pelota al wing. Otra forma de sacar ventajas de esta formación es utilizando al octavo junto a su tercera línea. El octavo tiene más espacio por donde arrancar y si logra traspasar la tercera línea rival normalmente el 10 tiene muchas dificultades para bajarlo, y al haber ganado la línea de la ventaja se desorganiza la defensa haciéndola más vulnerable a un ataque veloz y vertiginoso.
Esta de más decir que para poder sacar provecho a esta formación, es necesario tener un scrum sólido y que vaya hacia delante.
Otra ventaja que tiene este cambio en el reglamento, es que hace mucho más vistoso el juego de ataque, para así poder deleitarnos los fanáticos del ataque dinámico y agresivo.