La selección neozelandesa de rugby será el mayor obstáculo del campeón defensor Sudáfrica en la Copa Mundial del mes que viene pese a sus últimas derrotas en el torneo Tres Naciones, dijo el lunes el entrenador de los Springboks, Peter de Villiers.
Los All Blacks, anfitriones del Mundial, perdieron 18-5 ante Sudáfrica en Port Elizabeth y luego 25-20 frente a Australia en Brisbane, un resultado que le dio a los Wallabies el título del Tres Naciones.
[youtube id=»_V8DuUfIybw» width=»600″ height=»350″]«Los Wallabies lo hicieron bien el sábado, achicaron los espacios porque a ambos equipos les gusta jugar abiertamente. Se concentraron más en sus forwards, fueron brutales y estuvieron muy concentrados», destacó De Villiers en una conferencia de prensa.
«Pero nada cambió. Ganarle a Nueva Zelanda en Nueva Zelanda sigue siendo muy difícil y ellos siguen siendo favoritos para el Mundial. Pero si la presión llega a su equipo, podría afectar su manera de jugar», agregó.
Los Springboks visitaron más temprano al presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, en su residencia en Pretoria.
Los Springboks viajarán a Nueva Zelanda el jueves y llegarán el sábado a Wellington, donde iniciarán la defensa de su título mundialista frente a Gales el 11 de septiembre.
El médico del equipo, Craig Roberts, dijo que los tres cuartos Ruan Pienaar, Francois Steyn y Pat Lambie, así como el centro Jean de Villiers y los segunda línea Victor Matfield y Bakkies Botha padecían lesiones menores y realizarían un entrenamiento diferenciado más tarde el lunes.